VÍA CRUCIS DE LA DIVINA MISERICORDIA


En el nombre del Padre y del hijo y del Espíritu Santo. Amen. 

ORACIÓN INICIAL
Padre de amor y de Misericordia, te  pedimos  en estos momentos por aquellos tus  hijos, que se encuentran en pecado, como un barco sin timón a la deriva. Te pedimos por tu amor de Padre bueno, que los hagas llegar a tierra firme y al anclar, sea en la roca de nuestro amado hermano Jesús.
Te rogamos que nos perdones por habernos dejado seducir por el pecado, en este bello mundo creado por ti y que no lo valoramos como tú quieres. Envíanos al Espíritu Santo para que nos acompañe y nos haga ver el pecado que tú aborreces. Te alabamos y te bendecimos por habernos creado para ti. Amén.


1ra. ESTACIÓN: JESÚS ES CONDENADO A MUERTE
Obra de Misericordia: Visitar a los encarcelados

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Juan nos dice en su evangelio (19,14-16): Era el día de la Preparación de la Pascua, hacia el mediodía. Dijo Pilato a los judíos: “Aquí tienen a su rey”. Ellos gritaron: ¡Fuera, fuera! ¡Crucifícalo! Replicó Pilato: ¿A su rey voy a crucificar?. Contestaron los sumos sacerdotes: “No tenemos más rey que el César”. Entonces se los entregó para que fuera crucificado. Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Todos tenemos necesidad de ser purificados, de ser lavados. Todos, yo el primero. Todos somos buscados por este Maestro que nos quiere ayudar a reemprender el camino. A todos nos busca el Señor para darnos su mano. Es penoso constatar sistemas penitenciarios que no buscan curar las llagas, sanar las heridas, generar nuevas oportunidades. Es doloroso constatar cuando se cree que solo algunos tienen necesidad de ser lavados, purificados no asumiendo que su cansancio y su dolor, sus heridas, son también el cansancio, el dolor, las heridas, de toda una sociedad.
(Discurso a los presos del Instituto Correccional Curran-Fromhold de Filadelfia, en Estados Unidos, 27, Sep. 2015)

Señor Jesús, te pedimos por todos los encarcelados en el mundo entero para que nos enseñes a ser misericordiosos con ellos y reconocer sus necesidades de comprensión y amor; también te pedimos por quienes son condenados a causa del Evangelio y por nosotros, que hemos recibido la fe, para que vivamos la libertad de ser hijos tuyos.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


2da. ESTACIÓN: JESÚS CARGA LA CRUZ EN SUS HOMBROS
Obra de Misericordia: Enseñar al que no sabe

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Juan en su Evangelio nos dice (19,17): Tomaron pues a Jesús que, cargando con su cruz, salió hacia el lugar llamado Calvario, que en hebreo se dice Gólgota.  Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Un buen educador apunta a lo esencial. No se pierde en los detalles, sino que quiere transmitir lo que verdaderamente cuenta para que el hijo o el discípulo encuentren el sentido y la alegría de vivir. Es la verdad. Y lo esencial, según el Evangelio, es la misericordia. El cristiano necesariamente debe ser misericordioso, porque este es el centro del Evangelio. Y fiel a esta enseñanza, la Iglesia no puede más que repetir lo mismo a sus hijos: «Sed misericordiosos», como lo es el Padre, y como lo fue Jesús. Misericordia.
(Catequesis del 10 de septiembre del 2014)

Señor, te pedimos por lo que viven en la ignorancia de tu amor y tu misericordia, crea en todos nosotros un corazón de discípulos misioneros para que sepamos llevar con generosidad la enseñanza de tu Amor a todos los que nos rodean. Amen

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


3ra ESTACIÓN: JESÚS CAE POR PRIMERA VEZ
Obra de Misericordia: Corregir al que se equivoca

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

 San Marcos en su Evangelio nos dice (8,34-35): Llamando a la gente a la vez que a sus discípulos, les dijo: “Si alguno quiere venir en pos de mí”, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Porque quien quiera salvar su vida, la perderá; pero quien pierda su vida por mí y por el Evangelio, la salvará.

Enseñanza del Papa Francisco:
Todos tenemos la capacidad de pecar y de hacer lo mismo, de equivocarnos en la vida. El otro no es más malo que tú o que yo. La misericordia supera todo muro, toda barrera, y te conduce a buscar siempre el rostro del hombre, de la persona. Y es la misericordia la que cambia el corazón y la vida, que puede regenerar a una persona y permitirle incorporarse de un modo nuevo en la sociedad.
(Catequesis del 10 de septiembre del 2014)

Oh Padre, que has enviado a tu Hijo como Luz del mundo y Palabra de Verdad, suscita en los jóvenes el firme deseo de entregar su vida al servicio de la Iglesia y ser verdaderos testigos y anunciadores del Evangelio.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


4ª ESTACIÓN: JESÚS ENCUENTRA A MARÍA, SU MADRE
Obra de Misericordia: Dar posada al forastero

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Lucas nos dice en su Evangelio (2,34-35): Simeón, después de bendecirlos, dijo a María, la madre: «Este niño será causa de caída y de elevación para muchos en Israel; será signo de contradicción, y a ti misma una espada te atravesará el corazón. Así se manifestarán claramente los pensamientos íntimos de muchos».

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Acoger en casa al forastero o dar posada al peregrino, en  la  formulación  de  una  de  nuestras obras de misericordia, son una práctica que además de satisfacer una necesidad, dignifica y plenifica la vida de quienes lo practican. El amor, después de todo, nunca podrá ser una palabra abstracta. Por su misma naturaleza es vida concreta: intenciones, actitudes, comportamientos que se verifican en el vivir cotidiano.
(Jornada de ayuno y oración por la paz en Siria, 7 de septiembre de 2015)

Padre, que reúnes a tu pueblo desde todas las naciones de la tierra, ayúdanos a que, como la Madre de la Divina Misericordia, meditemos la Palabra en nuestro corazón y podamos anunciar a todos los hombres la experiencia que, merced a tu Espíritu, tenemos de Cristo.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


5ª ESTACIÓN: SIMÓN CIRINEO AYUDA A JESÚS A LLEVAR LA CRUZ
Obra de Misericordia: Visitar al Enfermo

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

 San Marco en su Evangelio nos dice (15,21): “Simón de Cirene, el padre de Alejandro y de Rufo, que volvía del campo y pasaba por allí, fue obligado a cargar con su cruz”. Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Cada vez que se ayuda discretamente a quien sufre, o cuando se está enfermo, se tiene la ocasión de cargar sobre los propios hombros la cruz de cada día y de seguir al Maestro (cf. Lc 9,23); y aun cuando el encuentro con el sufrimiento sea siempre un misterio, Jesús nos ayuda a encontrarle sentido.
(Mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del Enfermo 2016)

Padre de bondad, que quieres que todos los hombres se salven, te pedimos por todos los enfermos en el mundo entero para que encuentren consuelo y esperanza acompañándote en el dolor de cruz; danos a todos nosotros un corazón misionero y misericordioso para que como buenos Cirineos acompañemos a todos los que sufren en la enfermedad llevándoles tu amor.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


6ª ESTACIÓN: VERÓNICA ENJUGA EL ROSTRO DE JESÚS
Obra de Misericordia: Dar de beber al sediento

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

El Libro de Isaías nos dice (52, 14-15): Del mismo modo que muchos quedaron asombrados al verlo, pues tan desfigurado estaba que no parecía un hombre, ni su apariencia era humana-, así se admirarán muchas naciones; ante él cerrarán los reyes la boca, pues verán lo que nunca les contaron y descubrirán lo que nunca oyeron. Palabra de Dios…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Hoy existe una multitud de hombres y mujeres cansados y sedientos, que nos piden a los cristianos que les demos de beber. Es una petición a la que no podemos sustraernos. En la llamada a ser evangelizadores, todas las Iglesias y Comunidades eclesiales encuentran un ámbito fundamental para una colaboración más estrecha. Para llevar a cabo este cometido con eficacia, se ha de evitar cerrarse en los propios particularismos y exclusivismos, así como imponer uniformidad según los planes meramente humanos
(Homilía domingo 25 de enero de 2015).

Jesucristo, Señor nuestro, concédenos que todos los bautizados te encontremos y acojamos en el rostro sufriente de nuestros hermanos que tienen sed física y espiritual; ayúdanos a ser misioneros de tu amor llevándoles tu amor que los saciará para siempre.
Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


7ma. ESTACIÓN: JESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ
Obra de Misericordia: Dar buen consejo al que lo necesita

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Marcos en su Evangelio nos dice (9, 31-32): Les decía: El Hijo del Hombre será entregado en manos de los hombres; lo matarán, más a los tres días de haber muerto resucitará. Pero los discípulos, que no entendían sus palabras, tenían miedo de preguntarle. Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Nadie camina solo y nadie de nosotros puede pensar que está solo: está siempre este compañero. Cierto, sucede que cuando no queremos escuchar su consejo, escuchar su voz, le decimos: “¡Bah desaparece!”. Pero poner de patitas en la calle al compañero de camino es peligroso, porque ningún hombre, ninguna mujer puede aconsejarse a sí mismo: yo puedo aconsejar a otro, pero no aconsejarme a mí mismo.
(Homilía jueves 2 de octubre de 2014)

Señor Jesucristo, te pedimos por la Iglesia peregrina en el mundo, para que sepa llevar el buen consejo al que necesita y cada día no apoyemos unos a otros en la misericordia de tu amor, siendo un anuncio comprometido y solidario a favor de la vida la cual se obtiene sólo en Ti Amen.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


8va. ESTACIÓN: JESÚS CONSUELA A LAS MUJERES DE JERUSALÉN
Obra de Misericordia: Consolar al que esta triste

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

 San Lucas en su Evangelio nos dice (23,27-28): Le seguía una gran multitud del pueblo y mujeres que se dolían y se lamentaban por él. Jesús se volvió a ellas y les dijo: Hijas de Jerusalén, no lloren por mí; lloren más bien por ustedes y por sus hijos. Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Hoy necesitamos personas que sean testigos de la misericordia y de la ternura del Señor, que sacude los resignados, reanima los desalentados, enciende el fuego de la esperanza. Muchas situaciones requieren nuestro testimonio consolador. Pienso en aquellos que están oprimidos por el sufrimiento, la injusticia y el abuso de poder; a los que son esclavos del dinero, del poder, del éxito, de la mundanidad. Todos estamos llamados a consolar a nuestros hermanos, testimoniando que sólo Dios puede eliminar las causas de los dramas existenciales y espirituales.
(Homilía 7 de diciembre del 2014)

Señor Jesús, Buen Pastor que entregaste tu vida por nosotros tus ovejas, te pedimos por nuestros hermanos que sufren por las múltiples tristezas que hay en el mundo, para que no decaiga su fe en ti; y ayúdanos a nosotros para ser tus instrumentos de amor y misericordia en todo lugar anunciando tu alegría y paz al que lo necesita. Amen.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


9na. ESTACIÓN: JESÚS CAE POR TERCERA VEZ
Obra de Misericordia: Sufrir con paciencia los defectos del otro

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

El Libro de Isaías nos dice (53,5): Más fue herido por nuestras faltas, molido por nuestras culpas. Soportó el castigo que nos regenera y fuimos curados con sus heridas.  Palabra de Dios…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Este comportamiento, sentirse perfectos y por lo tanto capaces de juzgar los defectos de los demás, es contrario a la mansedumbre, a la humildad de la que habla el Señor, «a esa luz que es tan bella y que está en perdonar». Jesús usa una palabra fuerte: « hipócrita». Los que viven juzgando al prójimo, hablando mal del prójimo, son hipócritas. Porque no tienen la fuerza, la valentía de mirar los propios defectos.
(Viernes 13 de septiembre de 2013)

Padre Celestial, que envías a tu Unigénito para nuestra salvación, ponemos en tus manos nuestro corazón, para que día a día aumente en nuestro corazón la paciencia y la caridad para sobrellevar los defectos propios y los de los demás, creciendo en nosotros un corazón misionero, portador de tu amor, a ejemplo de Cristo tu Hijo. Amen.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


10ma. ESTACIÓN: JESÚS ES DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS
Obra de Misericordia: vestir al desnudo

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Marcos en su Evangelio nos dice (15,24): Lo crucificaron y se repartieron sus vestidos, echándolos a suertes, a ver qué se llevaba cada uno.  Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Hoy, aquí, pidamos la gracia para todos los cristianos. Que el Señor nos dé a todos nosotros el valor de despojarnos, pero no de 20 dólares; despojarnos de lo mundano, que es la lepra, es el cáncer de la sociedad. ¡Es el cáncer de la revelación de Dios! ¡El espíritu del mundo es el enemigo de Jesús! Pido al Señor que, a todos nosotros, nos dé esta gracia de despojarnos.
(Encuentro con los pobres asistidos por CÁRITAS, viernes 4 de octubre de 2013)

Jesucristo, Cordero inmolado por la humanidad, te rogamos por todas las personas que sufren por la desnudez, el despojo de sus cosas, para que aun en la necesidad física recuerden que te tienen a ti como protector, dales un corazón abierto a recibir tu Palabra que vivifica, dignifica, libera y da sentido a la vida del ser humano. Amén.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


11ra. ESTACIÓN: JESÚS ES CLAVADO EN LA CRUZ
Obra de Misericordia: Dar de comer al hambriento

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Lucas en su Evangelio nos dice (23,33): Llegados al lugar llamado Calvario, lo crucificaron allí junto con los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda.  Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Pido al Todopoderoso, al Dios rico en misericordia, que bendiga a todos los que, con diferentes responsabilidades, se ponen al servicio de los que pasan hambre y saben atenderlos con gestos concretos de cercanía. Ruego también para que la comunidad internacional sepa escuchar el llamado de esta Conferencia y lo considere una expresión de la común conciencia de la humanidad: dar de comer a los hambrientos para salvar la vida en el planeta. Gracias
(Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición, 20 de noviembre del 2014)

Señor, te pedimos por la humanidad redimida por tu Hijo, que camina clavada en una cultura de muerte, para que concorde con lo que has impreso en su naturaleza, se comprometa con responsabilidad a vivir en plenitud. Amen.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


12da. ESTACIÓN: JESÚS MUERE EN LA CRUZ
Obra de Misericordia: Perdonar al que nos ofende

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

 San Marcos en su Evangelio nos dice (15,33-34.38-39): Llegada la hora sexta, la oscuridad cubrió toda la tierra hasta la hora nona. A la hora nona gritó Jesús con fuerte voz: “Eloí, Eloí, ¿lemá sabactaní?”, que quiere decir: ¡Dios mío, Dios mío! ¿Por qué me has abandonado?… Entonces el velo del Santuario se rasgó en dos, de arriba abajo. El centurión, que estaba frente a él, al ver que había expirado de aquella manera, dijo: verdaderamente este hombre era hijo de Dios.  Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Ante todo, «pedir perdón no es un simple pedir disculpas» sino que «es ser consciente del pecado, de la idolatría que construí, de las muchas idolatrías»; en segundo lugar, «Dios siempre perdona, siempre», pero pide que también yo perdone, porque «si yo no perdono», en cierto sentido es como si cerrase «la puerta al perdón de Dios». Una puerta, en cambio, que debemos mantener abierta: dejemos entrar el perdón de Dios a fin de que podamos perdonar a los demás.
(Homilía del 10 de marzo del 2015)

Señor Jesucristo, haz que seamos muchos los que tengamos un amor tan grande como el tuyo, dispuestos a entregar el perdón y la propia vida por los hermanos en el mundo entero y por el anuncio del Evangelio de salvación.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


13ra. ESTACIÓN: JESÚS ES BAJADO DE LA CRUZ
Obra de Misericordia: Orar por los vivos y los difuntos

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

San Juan en su Evangelio nos dice (19,38): Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús, aunque en secreto por miedo a los judíos, pidió a Pilato autorización para retirar el cuerpo de Jesús. Pilato se lo concedió. Fueron, pues, y retiraron su cuerpo.  Palabra del Señor…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
También nosotros, cuando no rezamos, lo que hacemos es cerrar la puerta al Señor. Y no rezar es esto: cerrar la puerta al Señor, para que no pueda hacer nada. En cambio, la oración, ante un problema, una situación difícil, una calamidad, es abrir la puerta al Señor para que venga. Porque Él hace nuevas las cosas, sabe arreglar las cosas, ponerlas en su sitio. Rezar es esto, abrir la puerta al Señor para que pueda hacer algo.
(Homilía 8 de octubre del 2013)

Señor Jesús, que moriste en la Cruz por amor a los hombres, te pedimos por aquellos que han consagrado su vida a tu servicio, sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos, para que, a pesar del dolor y el sufrimiento, puedan proclamar tu mensaje de esperanza a quienes lo necesiten.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


14ta. ESTACIÓN: JESÚS ES DEPOSITADO EN EL SANTO SEPULCRO
Obra de Misericordia: Enterrar a los muertos

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

 San Juan en su Evangelio nos dice (19,39-42): Fue también Nicodemo aquel que anteriormente había ido a verle de noche. Con una mezcla de mirra y áloe de unas cien libras. Tomaron el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en lienzos con los aromas, conforme a la costumbre judía de sepultar. En el lugar donde Jesús había sido crucificado había un huerto, y en el huerto un sepulcro nuevo, en el que nadie todavía había sido depositado. Allí, pues, pusieron a Jesús, porque era el día de la Preparación de los judíos y el sepulcro estaba cerca.  Palabra del Señor…
L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Entre ayer y hoy muchos visitan el cementerio, que, como dice esta misma palabra, es el «lugar del descanso» en espera del despertar final. Es hermoso pensar que será Jesús mismo quien nos despierte. Jesús mismo reveló que la muerte del cuerpo es como un sueño del cual Él nos despierta. Hoy estamos llamados a recordar a todos, incluso a aquellos a quien nadie recuerda. El recuerdo de los difuntos, el cuidado de los sepulcros y los sufragios son testimonios de confiada esperanza, arraigada en la certeza de que la muerte no es la última palabra sobre la suerte humana, puesto que el hombre está destinado a una vida sin límites, cuya raíz y realización están en Dios.
(Ángelus 2 de nov. 2014)

Oh buen Jesús, que durante toda tu vida te compadeciste de los dolores ajenos, mira con misericordia las almas de nuestros seres queridos difuntos, escucha la súplica que te hacemos, y por tu misericordia concédeles gozar del eterno descanso en el seno de tu infinito amor. Amén

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


15ta. ESTACIÓN: JESÚS RESUCITÓ A LA VIDA PLENA
Obra de Misericordia: LA MISERICORDIA ABSOLUTA DE DIOS

V. ¡Te adoramos, Cristo, y te bendecimos!
T. Porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

El libro de Corintio nos dice (15,17. 19-20): Y si Cristo no resucitó, su fe es vana: siguen en sus pecados… Si nuestra esperanza en Cristo se limita sólo a esta vida, ¡somos las personas más dignas de compasión! ¡Pero no! Cristo resucitó de entre los muertos como primicia de los que murieron.  Palabra de Dios…

L/ Padre Eterno te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la Divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo.
R/ Como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero.

Enseñanza del Papa Francisco:
Siempre tenemos necesidad de contemplar el misterio de la misericordia. Es fuente de alegría, de serenidad y de paz. Es condición para nuestra salvación. Misericordia: es la palabra que revela el misterio de la Santísima Trinidad. Misericordia: es el acto último y supremo con el cual Dios viene a nuestro encuentro. Misericordia: es la ley fundamental que habita en el corazón de cada persona cuando mira con ojos sinceros al hermano que encuentra en el camino de la vida. Misericordia: es la vía que une Dios y el hombre, porque abre el corazón a la esperanza de ser amados para siempre no obstante el límite de nuestro pecado. (Bula Misericordiae Vultus #2).

Oh, Padre de Amor, te pedimos, por intercesión de los santos y mártires misioneros, que, como ellos, nos ayudes a ser testigos del Resucitado hasta los confines de la tierra, llevando la buena nueva de la Vida.

Rezar 10 veces
V/ Por su dolorosa pasión.
T/ Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.

Oración: La Misericordia viene a mí, en mi fluye la Misericordia, reina en mi mente la Misericordia, la Misericordia hacer palpitar mi corazón, yo soy Misericordioso para la gloria de Yahveh, en el ayer que paso, en el hoy de este momento, en el mañana de la victoria del que confía en el Emmanuel, yo creo en el Padre, yo confío en Jesús, yo me doy al Espíritu Santo. Aleluya-Amén. 


OREMOS POR EL SANTO PADRE EL PAPA:
Amado Padre, fuente de vida y verdad, concédele a tu Pastor el Papa …, a quien elegiste como sucesor de Pedro, Vicario de Cristo, un espíritu de coraje, sabiduría y amor.  Bendícelo con la salud, protégelo para que continúe con la labor de pastorear con fidelidad a Tu Iglesia, siendo el centro visible, el fundamento de nuestra unidad en la fe y el amor, que nuestra Madre de la Divina Misericordia guíe sus pasos y en sus manos entregamos a nuestro Santo Padre el Papa Francisco. Te lo pedimos en Nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amén.


Rezando un Padrenuestro, Avemaría y Gloria por las intenciones de nuestro Sumo Pontífice

ORACIÓN FINAL
Benignísimo y sempiterno, padre de amor y misericordia, miramos, te suplicamos nosotros pecadores arrepentidos, que en nombre de tu Divino Hijo Jesucristo, nos avoquemos a ser almas reparadoras perpetuamente y junto a la gloriosa intercesión de la Madre de la Divina Misericordia, alcancemos las gracias necesarias para nuestra salvación y la de nuestros hermanos.¡ Amén, aleluya!